"Eterno amor", Pilar Adón

  • Título: Eterno amor
  • Autora: Pilar Adón
  • Ilustraciones: Kike de la Rubia
  • Género: Narrativa, cuento ilustrado
  • Editorial: Páginas de Espuma
  • ISBN: 978-8483932933

Es la segunda obra que leo de Pilar Adón y vuelvo a quedarme sin palabras para contaros lo que he leído.

He vuelto a sumergirme en sus palabras, en el maravilloso juego en el que convierte la escritura esta mujer. He vuelto a entrar de lleno en esa opresión de ambientes y personajes que te dejan sin aire, pero que, al mismo tiempo, gracias a esa manera de escribir, te acunan y hacen de la lectura lo que más busco en ella: placer y deleite. Es un cuento ilustrado en prosa, pero también es poesía, sin duda.

La historia es simple en apariencia: una mujer llega a una casa donde convive con una comunidad de mujeres que tienen a su cargo a unos niños a los que tienen que cuidar, educar y “reformar”. La rutina deseada e idílica que hace que todo en esta casa funcione se verá rota por la llegada de un hombre al que se verán obligadas a recibir y acoger, a pesar de no tener muy claras sus intenciones. Digo que es simple en apariencia porque realmente esta historia de simple no tiene nada. Podría empezar por qué clase de comunidad es la de estas mujeres, pero prefiero que sigáis las miguitas de pan que nos va dejando Adón y lo descubráis vosotras mismas. Esas migas de pan también nos llevarán por los caminos necesarios para ir descubriendo qué es lo que está pasando, dónde estamos, en qué época, la razón del título de este cuento: el amor, ese amor desinteresado, no físico, no romántico, casi místico…

Todo es creíble e increíble a la vez. Fantasía, realidad, pasado, presente, futuro, belleza, fealdad… todo se mezcla en estas páginas que también están cargadas de intriga, tensión y preguntas que se irán respondiendo. Tiene un final sobrecogedor que leí dos veces seguidas porque creí ver un resumen de todo el libro y porque (a lo mejor me equivoco, es arriesgado, lo sé) vi una similitud con la única novela que he leído de ella (que dista de este cuento la friolera de 19 años) y que me muero por comprobar si también es compartido en el resto de sus obras. Otro punto es que nada más leer el punto final, sentí la necesidad de comenzarlo de nuevo, y así lo hice…me gustó aún más.

Me falta hablar de las ilustraciones de de la Rubia: exquisitas, sugerentes y evocadoras. Una maravilla.

Una joyita que recomiendo encarecidamente y que acompaño de un consejo: disfrutadla sin más, seguid adelante, aunque no comprendáis del todo de qué va…poco a poco se hará la luz, todo encajará y os enamorará.

Comentarios

  1. Ganicas le tengo ya. Desayunando con tu reseña para empezar bien el día

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    Respuestas
    1. ¡Gracias! Ojalá te guste mucho. Es así como raro, pero a mí me ha encantado

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  2. Cómo me gusta seguir tus consejos. Y sí, una joya como objeto (magníficamente editado, la ilustración, el gramaje del papel, un auténtico placer para los sentidos) pero es que el texto siendo prosa, como tú dices, es poesía pura. Y sin espoilers. Yo también he tenido que leer el final un par de veces y sigo pensando en eso que dices, irte metiendo... saborear

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